Albergue Juvenil – Vida nocturna en París

La vida nocturna en París le puede costar muy caro, no sólo debido a la cantidad de tentaciones, sino también porque el costo es relativamente elevado. Por ejemplo, en promedio, una cerveza le cuesta entre 5 y 6 Euros. Cualquier bebida le costará mucho más si se sienta en un café cerca de los monumentos populares de París.  Aún así, tiene que tomarse un trago en el legendario Café de Flore, donde se inspiraron muchos de los grandes filósofos.

Todos los distritos tienen su propio conjunto de bares.  Los establecimientos más animados están en París alrededor de la plaza de la Bastilla, el Barrio Latino y Montmartre.  Rue Etienne Marcel, cerca de Les Halles, tiene una serie de pequeños bares y restaurantes que son muy agradables, sin mencionar que tambien tienen muchas tiendas de moda.  Vale la pena darse un paseo por ahí.

Si usted no bebe licor, París tambien tiene muchas actividades en la tarde!  La Torre Eiffel enciende todas sus luces por 10 minutos para el deleite de los transeúntes a partir de las 9pm.

Para ver los otros monumentos de la ciudad luz, le recomendamos caminar a lo largo del Rio Sena y atravesar uno de los muchos puentes a la hora del atardecer, o caminar a lo largo del Canal St. Martin…  París de noche es muy romántico. Si te gusta bailar, ya sea la salsa o el tango, no te olvide de ir al Quai San Bernardo, donde los bailes se llevan acabo al aire libre durante todo el verano, si el clima lo permite.

Comer en París 
La cocina francesa es reconocida mundialmente y París tiene una gran selección de restaurantes que van de lo simple a lo chic. Entre estos dos extremos, puede encontrar muchos cafés pequeños de muy buen gusto y calidad, a un precio bastante razonable.  El costo del consumo en París, en promedio, es más elevado que en cualquier otra parte  menos turística. Manténgase alejado de las áreas de grandes monumentos para evitar el golpe! 

Para los presupuestos ajustados también es posible comprar sandwiches, quiches y otros bocadillos en las panaderías y comérselos en una banca de los parques de la ciudad que son tan hermosos.