Guía del principiante para hacer senderismo en la República Checa

Por Carmen Recavarren
Publicado el 22 abril 2016

 

Caption: La catarata Pančavský en las asombrosas montañas Krkonoše de la República Checa

La mayoría de los visitantes a la República Checa quieren reservar en un hostal céntrico en Praga y explorar la animada e histórica capital del país. Y bueno, estamos de acuerdo con eso. Pero no hay que olvidar que este es uno de los países más bellos de Europa, y famoso también por sus albergues baratos lo que hace que sean una fabulosa manera de explorar las pintorescas zonas rurales.

Así que además de visitar Praga, dirígete al campo de la República Checa por senderos a través de los famosos viñedos y paseos por serpenteantes caminos en la montaña. Tanto si eres un principiante o un excursionista experimentado, descubrirás algunos lugares fantásticos y una gran cantidad de tabernas tradicionales, donde recargar tus baterías con un abundante plato de comida típica checa.

Región de Moravia Meridional

Desde la ciudad de Brno, es fácil contratar una excursión de un día a la región de Moravia. Famosa por su gran cantidad de bodegas y viñedos, la región cuenta con 1.200 kilómetros de rutas de senderismo y ciclismo, conocida como la Ruta del Vino de Moravia. Estos senderos transitan a través de una zona rica en historia, pasando por castillos medievales, antiguos monasterios y sitios pequeños donde disfrutar de un refrescante vaso de vino. Lo mejor es que se puede entrar y salir de cada ruta para conseguir el viaje perfecto, dependiendo de si eres un excursionista experimentado o un perfecto principiante.

Valle del Río Ohře

En la esquina noreste de la República Checa, el valle del río Ohře se extiende entre las ciudades de Karlovy Vary y Loket. El camino a través del valle puede que tenga tan sólo ocho kilómetros de largo, pero se las arregla para incluir muchas cosas. A lo largo de la ruta encontrarás paredes de granito natural y grandes pilares de roca, pero lo más destacado es el famoso conjunto de rocas Svatoš.

La leyenda cuenta que esta formación de piedras petrificadas en realidad se trata de un grupo de personas de una boda que fueron convertidos en piedras por una ninfa. Desde las rocas Svatoš, es fácil ir hacia el castillo de Loket, construído en el siglo XIII, edificación que fue alguna vez la casa de la familia real Checa. Si te llaman la atención los castillos y las ninfas, encontrarás una habitación o dormitorio en el colorido pueblo de Karlovy Vary.


Třeboň

Un albergue en Jindrichuv Hradec o Ceske Budejovice te acercará y te ofrecerá una experiencia más personal de la región de Třeboň con su abundancia de lagos. Con tantos lagos, pantanos y marismas que no sabrás que hacer con ellos, Třeboň es una reserva de la biosfera de la UNESCO. Está llena de toda la flora y fauna sobre la que tus libros de geografía te han hablado. Las ciudades renacentistas y fortalezas medievales que encontrarás a lo largo de la región le añaden un toque mágico cuando te albergues allí.


Los montes Krkonoše (Montes de los Gigantes)


Ir a las pistas de verano y de invierno de Rokytnice nad Jizerou o Jablonec nad Nisounear en la cordillera de los Montes Gigantes, justo en la frontera con Polonia. Allí está esperando por ti el pico más alto de la República Checa, el monte Sněžka. Existen senderos para caminar bordeando la base de la montaña, y un telesilla te puede llevar todo el camino hasta la cima. Es muy popular entre los excursionistas, la pequeña ciudad de Pec pod Sněžkou, en la base de la montaña, que se convierte en una popular estación de esquí durante el invierno.